“Por razones muy extrañas” declaró el gobernador Enrique Alfaro Ramírez que no habían llegado a Jalisco las 20 mil muestras rápidas por las que se emitió una orden de compra e iban a pagar poco más de 20 millones de pesos a la empresa Hisa Farmacéutica, SA de CV, que luego ni las llamadas telefónicas les respondió.

Aseguró que eran pruebas provenientes de Alemanía, que contaban con la certificación FDA y que estaban en la frontera; luego, fue cuando el escenario se modificó y confesó que en la empresa ya ni contestaban el teléfono.

Extrañamente, se asegura que Hisa Farmacéutica, SA de CV cerró desde enero pasado, pero que ahora sigue trabajando bajo el nombre de Somecu Soluciones Médicas y de Curación, SA de CV, y que como tal es también proveedora del gobierno del Estado, según denunció ayer públicamente el titular de la Contraloría Ciudadana Independiente, Jorge Carlos Ruiz.

Quizás por eso en Hisa Farmacéutica, SA de CV ya no contestaban ni el teléfono.

Ante este primer fracaso, el Mandatario estatal declaró a varios noticiarios de difusión nacional que ya habían emitido otras órdenes de compra para adquirir las pruebas rápidas, y que no podía decir de dónde provendrían ni quién se las abastecería porque todavía no lo sabía.

Y efectivamente, el gobierno alfarista contactó a varios proveedores, pero también “por razones extrañas” con ninguno de ellos pudo concretar compra alguna, aunque eso nunca lo confesaron y dejaron abierta a los jaliscienses la creencia de que continuaban trabajando en ello para cumplir -como en reiteradas ocasiones lo confesó Alfaro Ramírez- con la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de aplicar “pruebas, pruebas y más pruebas”.

De hecho, se supone que esa, la de “pruebas, pruebas y más pruebas”, era la siguiente etapa dentro de los cuatro días extras de encierro domiciliario al que convocó tras cumplirse los primeros cinco días a los que había invitado cumplir. Pero no. Nada de eso. Incluso, de las pruebas rápidas nunca más se volvió a hablar. “Por razones extrañas” se guardó sospechoso silencio.

No fue sino hasta ayer cuando en un video en el que Alfaro Ramírez invita a sumarse ahora al encierro domiciliario que convocó el gobierno federal, primero hasta el 19 de abril y posteriormente hasta el 30 de ese mes, cuando el Mandatario habló otra vez de las pruebas rápidas, pero sólo para culpar al gobierno de Andrés Manuel López Obrador de que su gobierno no tenga esas pruebas que se había comprometido públicamente aplicar desde la semana pasada.

En ese video Alfaro denunció que “la autoridad federal no permite que entren las pruebas al país”. ¿De veras? ¿Y por qué ante la importancia de aplicar esas pruebas rápidas y considerando que está en juego conocer el número de casos de coronavirus para poder actuar en consecuencia, lo que significa incluso la posibilidad de morir, guardó silencio, contra su costumbre? ¿Por qué ahora no salió públicamente a denunciar que el gobierno lópezobradorista es el responsable de que su gobierno no esté aplicando las pruebas rápidas?

¿Realmente esa es la razón o será que acostumbrados a realizar compras sospechosas -ya sea por licitación o por adjudicación directa-, ahora no pudieron concretarlas como es la tradición y están acostumbrados a hacerlo en este gobierno de la Refundación fallida?

Y la pregunta es obligada porque el gobierno de Nuevo León, que encabeza Jaime “El Bronco” Rodríguez, anunció que ya tienen en su poder, y aplicarán de manera gratuita en 28 laboratorios certificados, nada menos que 50 mil pruebas rápidas. ¿Cómo es que los norteños tienen 50 mil pruebas en su poder si se supone, a decir de Alfaro, que “la autoridad federal no permite que entren las pruebas al país”? ¿Pues qué pruebas son las que tiene en su poder Nuevo León y cuáles son las que pretendía adquirir el gobierno alfarista de Jalisco? ¿Cuál es la diferencia? ¿Será, acaso, que aquellas obtuvieron el registro sanitario del país y las que pretendía adquirir Jalisco, no?

¿O será tanto el rencor que López Obrador le tiene a Alfaro que ordenó que no autorizaran la entrada de pruebas que adquiriera el gobierno de Jalisco? ¿Tan mezquino será el presidente de la República como para anteponer sus diferencias con su viejo aliado a la salud y vida de los jaliscienses?… La verdad, no lo creo.

Lo que sí creo es que “por extrañas razones” dentro de su gobierno, Enrique Alfaro fracasó en la adquisición de las pruebas rápidas que supuestamente iban a poner a Jalisco en primer lugar en la lucha contra el coronavirus.

¿O habrá algo más que todos ignoramos? Al tiempo…