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Julio César Hernández
David Gómez Álvarez, presidente del Instituto Electoral del Estado, y para quien, al igual que a sus compañeros consejeros, ya se activó la cuenta regresiva, cree tener los motivos suficientes para ser reelecto en el cargo y la presidencia:
“Creo que bajo mi conducción el Instituto Electoral podría llegara  las elecciones del 2012 mucho más fortalecido y con garantías de ofrecerle a los jaliscienses una elección absolutamente confiable, en un escenario altamente competitivo”.
Consideró que el motivo de su veto la primera ocasión que aspiró al cargo en 2005, y que fue su estrecha amistad con el entonces presidente estatal del PAN, Eduardo Rosales Castellanos, ya no es obstáculo para continuar en el cargo.
“Cuando aspiré en el 2005 se dio una lógica de veto que impidió que llegaran algunos perfiles que, a decir de los propios partidos, eran los más idóneos para el cargo. No sé si fue justo o no, pero fue parte de un proceso político que lamentablemente no privilegió los mejores perfiles, sino que se detuvo en el juego de los vetos”.
Reconoció que posteriormente, cuando entró a suceder a José Luis Castellanos en el cargo, tuvo un problema de origen al no haber contado con el apoyo de la bancada priista, pero asegura que ello fue remontado al lograr un proceso electoral -el del 2009- “exitoso, riguroso, honesto y ético, y fui ganándome la confianza de todos los actores políticos”.
Lamentó que en aquella ocasión -hace cinco años-, muchos sustentaron sus críticas en su amistad con Rosales Castellanos que, asegura, nunca fue una relación política. 
Ahora -apunta- ” apelo que al acuerdo político al que lleguen los legisladores, en el que puedan privilegiar ciertos perfiles que den garantía de la conducción limpia, honesta, transparente e independiente de las elecciones, y en ese sentido, que pudieran ver en mi persona la posibilidad de repetir en el cargo, sabiendo que ya tengo la experiencia, que ya dí resultados y que ya se disiparon las dudas”.