Torpemente manejado por los consejeros electorales, el tema de la urna electrónica para la elección del 2012 ha abierto diferencias entre los integrantes del Instituto Electoral, el gobernador Emilio González Márquez y el Partido Revolucionario Institucional.
Desde el principio, el PRI se ha manifestado, por desconfianza, reacio a que la elección del 2012 se lleve a cabo en su totalidad con urnas electrónicas, toda vez que, además, el Instituto Electoral nunca convocó ni invitó a los partidos políticos a trabajar previamente en este tema, de ahí que sea el primero en oponerse.
Por otro lado, luego del fracaso de la primera licitación para la adquisición de las urnas, y tras revelarse una serie de presuntas irregularidades, los propios Consejeros Electorales consideran que será difícil que los comicios del próximo año se lleven a cabo mediante las 10 mil 400 urnas electrónicas y comienza a manejarse la posibilidad de que se aplique solamente en dos o tres distritos y algunos municipios.
Sin embargo, ya el gobernador González Márquez advirtió el viernes que el Instituto Electoral tendrá que efectuar la totalidad de la elección con urna electrónica, pues dijo que no tendría sentido implementar este sistema solamente en algunas regiones o municipios.
El Mandatario estatal refirió que hasta el momento el presidente del Instituto, Tomás Figueroa Padilla, no le ha notificado la cancelación de la urna electrónica en toda la elección, pero la razón es que los consejeros no se han puesto de acuerdo al respecto, aunque ante las complicaciones para el proceso de adquisición de las urnas y, principalmente, la oposición del PRI, todo indica que será parcial el uso de este sistema en los comicios del 2012.