Vaya escándalo que provocaron en las redes sociales y una enorme preocupación en el Ayuntamiento de Guadalajara, particularmente al munícipe Jesús Pablo Lemus Navarro, los 41 segundos del video difundido ayer por Latinus en el que aparece el periodista Carlos Loret de Mola diciendo lo siguiente:

“Vaya polémica que se desató por el atraso y el costo del carrusel traído de Francia por Pablo Lemus, el famoso presidente municipal de Guadalajara, que es el gallo de Movimiento Ciudadano para ser candidato a gobernador en 2024 y que va cómodamente arriba en las encuestas.

“El gobierno de Lemus pagó casi 26 millones de pesos por este carrusel que va a estar en distintas zonas en Guadalajara. Pero para que se dé una idea: En Argentina, en San Martín Argentina, está por inaugurarse un carrusel similar, pero al que le cabe más gente, más grande, más alto, más ancho… y cinco veces más barato”.

Hay que hacer un paréntesis para aclararle a Loret de Mola -que al parecer está desinformado-, que Movimiento Ciudadano ya dijo que tiene cuatro “gallos” y a la senadora Verónica Delgadillo para ser el candidato o la candidata a la gubernatura, por lo que Lemus Navarro no es el único.

Pero volviendo al tema, en sólo 41 segundos Loret de Mola logró lo que lamentablemente no pudo la oposición ni ciudadanos inconformes con el ya famoso carrusel durante semanas, o quizás hasta meses: preocupar a Lemus Navarro, quien de inmediato -aseguran-, giró instrucciones para contrarrestar los efectos que podría causar la evidencia que a lo largo y ancho del país, y más allá de nuestras fronteras, hizo pública uno de los periodistas más odiados por el presidente de la República.

Trascendió, incluso, que se creó un chat especial de un grupo de funcionarios municipales para atender la emergencia y lo que ahí se denominó “una campaña en Latinus”, advirtiendo que “si no cerramos frentes, se nos puede venir un problema…”.

De este chat, sobresale un mensaje que presuntamente sería del presidente municipal en el que pide “que se aclare lo de Latinus lo más temprano posible -“antes del mediodía”-, debemos cerrar ese frente”. Y luego vendría una orden: “Quiero pedirles seguimiento al tema del Carrusel, que se encuentre abierto todo el día, llevar estudiantes de muchas escuelas a diario, nos manden videos de las filas para ingresar, que se muestre feliz a la gente de utilizarlo”.

Como resultado, al parecer, de este intento de “cerrar frentes”, el Ayuntamiento de Guadalajara emitió un comunicado en el que no solamente solicita su derecho de réplica, sino que prácticamente le ordena y le dicta a Latinus lo que debe de decir pública y textualmente como versión de las autoridades tapatías, pues dice en su documento: “El Gobierno de Guadalajara (…) solicita que en el espacio del periodista Carlos Loret de Mola en su medio de comunicación, llamado Loret en Latinus, se comunique a su audiencia lo siguiente…”, y agrega entrecomillado lo que textualmente debe de publicar Latinus.

Y entonces explica que “la comparación hecha por Latinus -cuida de no meterse con el periodista que aparece en el video- entre el costo del carrusel de Guadalajara y el de San Martín, Argentina, no tomó en cuenta que el precio que pagó la municipalidad argentina era por un carrusel seminuevo”, y niega que su costo haya sido cinco veces menos que lo que pagó Lemus.

Así, pues, si ustedes andan por el centro de Guadalajara y observan largas filas de “felices” estudiantes en espera de subirse “a los caballitos franceses” que compró el munícipe Pablo Lemus, sabrán que todo responde a una estrategia para “cerrar frentes” ante la “campaña en Latinus”.

Sería bueno que Lemus Navarro revelara de quién sospecha que está detrás de la “campaña en Latinus” y que Latinus le aclare a su audiencia si lo dicho por Loret de Mola en ese video de 41 segundos, corresponde a una “campaña” en contra del gobierno de Guadalajara o de su presidente municipal.

Pero mientras “son peras o son manzanas”… “palo dado, ni Dios lo quita”.