Quienes han leído la fábula, leyenda o cuento, documentada por los hermanos Grimm, saben que el Flautista de Hamelín, tras interpretar una melodía con su flauta, sacó de la ciudad de Hamelín a miles de ratones que la habían invadido, a cambio de cien monedas de oro que ofrecieron los prohombres de la ciudad para que lo hiciera.
Sin embargo, al negarse estos prohombres a pagarle la tarea realizada, el flautista interpretó otra suave melodía y ahora quienes lo siguieron no fueron ratones sino los niños de la ciudad que, tomados de la mano, marcharon “tras los pasos del extraño músico”, para nunca más volver.
Parodiando ésta última imagen del cuento, fábula o leyenda, vemos al ex dirigente de Partido Acción Nacional y ya no militante Eduardo Rosales Castellanos quien, sin flauta en mano, busca embelesar a los panistas, primero, exhortándolos a la unidad, a cerrar filas en torno al PAN, y, segundo, pretendiendo convencerlos de que lo mejor para su partido en 2015 es ir en alianza… sin decirles con quién.
Y es que aseguran que esa fue la tarea que el ex dirigente panista emprendió durante su estancia en Puerto Vallarta este fin de semana cuando al mismo tiempo se celebraba ahí en el Puerto la Reunión Estatal de Estructuras del PAN.
Si, o sea que mientras la dirigencia del PAN se dedicaba a trabajar en torno a las estructuras, claro, también conminando a los asistentes a la unidad, en el edificio de enfrente Rosales Castellanos hacía su labor proselitista en favor de… quién sabe quién, pues finalmente él ya ni panista es.
Recuerde que ya no se reafilió al PAN.
Pero hay quien sospecha que aunque no lo dice abiertamente, Eduardo Rosales busca congregar a la militancia en torno al proyecto alfarista mediante una estrategia muy bien pensada que, dicen, pretende implementar de manera casi “quirúrgica” y sin violentar los estatutos del panismo que, por supuesto, él conoce muy bien.
Y es que mientras algunos panistas estaban muy concentrados con las conferencias o charlas agendadas, y algunos despistados se iban a los mariscos, Rosales Castellanos se entrevistaba con alcaldes y diversos liderazgos quienes previamente a la reunión fueron contactados y convocados a reunirse con él, en el marco de la reunión estatal.
Cuentan que tras convencer a los liderazgos panistas del estado de que sólo la unidad los hace fuertes, el siguiente paso de Eduardo Rosales será convencer a las estructuras del partido a que sólo a través de una alianza el PAN puede ser competitivo en el 2015. Y para ello, su corriente aun vigente al interior del partido busca quedarse, primero, con las presidencias de los comites municipales de Guadalajara y Zapopan, llevando como candidatos a Irving Ávila y Ramón Ramírez, respectivamente.
Coincidente y curiosamente, dicen que tanto Irving como Ramón se han manifestado a favor de una alianza de su partido en el 2015. ¿Será mucha casualidad?
Bueno, pues este sería el primer paso de Rosales.
El segundo sería conseguir el mayor número de espacios en el Consejo Estatal que se renovará el año próximo, luego de que lo haga el Nacional y de que se haya elegido ya al nuevo dirigente del CEN panista.
La estrategia es tener un Consejo mayoritariamete a favor de la alianza en 2015.
Pero no todo termina ahí, porque Rosales buscará quedarse con la “cereza del pastel” que será la presidencia del Comité Directivo Estatal del PAN.
¿Y sabe quién es su candidato para este espacio con el que espera concretar la alianza electoral…?
Se lo cuento en la siguiente entrega…