Este fin de semana, en el marco de las fiestas patrias, el Partido Acción Nacional celebró el 74 aniversario de su fundación en condiciones nada agradables, pues lo hace fuera de la presidencia de la República después de 18 años y de no pocas gubernaturas ahora en manos de otros otros partidos políticos.
El PAN en Jalisco también festejó un año más de vida, pero además de que lo hace sin ser el que gobierne la entidad, la zona metropolitana y otros municipios más, la situación que vive al interior no es de lo más alentador. La división interna sigue siendo el “cáncer” que no han podido combatir.
Por su lado anda el grupo denominado “Renovada Convicción”, encabezado por el ex dirigente Tarcisio Rodríguez Martínez y el regidor Alberto Cárdenas Jiménez, que con el argumento de buscar reactivar al panismo en el estado “placea” a su candidato a la dirigencia estatal, Miguel Ángel Martínez Espinoza.
Esto, por supuesto, al margen de su dirigencia que encabeza Miguel Ángel Monraz.
Por otro lado, está la fracción legislativa en el Congreso del Estado, donde es el mejor reflejo de la honda división que caracteriza hoy por hoy a un panismo que no logra reaccionar de su desastrosa derrota del año pasado, donde algunos aun siguen rumiando su desgracia y otros viendo la “paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio”, al no querer asumir su corresponsabilidad en dicha derrota.
Para empezar, la bancada blanquiazul tiene un coordinador que, aseguran, ninguno de sus compañeros quiere pero que aceptan porque es decisión del dirigente Monraz que continúe en el cargo; la misma está integrada por diputados que en más de una ocasión se han “rebelado” y actúan de acuerdo a su “conciencia” (en ocasiones entiéndase como sus propios intereses políticos); y varios legisladores más que complican que su dirigente Monraz pueda hacer el relevo de coordinador.
Por el otro, existe un ex panista, Ricardo Rodríguez Jiménez, de quien dicen que no descarta regresar al “rebaño” blanquiazul, siempre y cuando Gildardo Guerrero no sea más el coordinador.
En este marco de su aniversario, el PAN Jalisco se acerca cada vez más al relevo de su dirigencia estatal  -así como nacional y municipales-, con la aparición próxima de figuras que dejarán sentir su presencia, como es el caso del embajador de México en España, Francisco Ramírez Acuña, quien a principios de noviembre pisará tierra jaliscienses, así como del ex dirigente Eduardo Rosales Castellanos, que no obstante ya no ser militante panista mantiene el control de importantes “hilos” dentro del panismo.
Así, pues, el 74 aniversario de la fundación del PAN en Jalisco tuvo un sabor “agridulce” que, sin duda, les perdurará por no pocos años más.