Los dirigentes estatales del PAN y del PRI, Pilar Pérez Chavira y Ramiro Hernández García, así como el ex gobernador Francisco Ramírez Acuña, candidato a diputado federal por el distrito 10 de la alianza “Va por México”, pusieron sobre la mesa un tema que es preocupación general pero que nadie había querido hablar abiertamente de él: la inseguridad pública en el estado y el riesgo que corren los candidatos.

Para algunos partidos -si no es que para la mayoría- fue difícil postular candidatos en algunos municipios de las llamadas zonas “calientes” del estado, pero la preocupación se extiende a todo el territorio jalisciense ante el rumbo que han tomado diversos hechos dentro y fuera de la zona metropolitana donde se ha confirmado la participación del crimen organizado.

Ramiro Hernández fue el conducto para manifestar el sentir de los partidos y candidatos de la oposición: “El tema de la seguridad nos tiene sumamente preocupados por lo que ha pasado y por lo que vemos que está sucediendo. Aparejado a esto, no vemos a una autoridad preocupada, comprometida y haciendo algo para evitar que sucedan hechos delictivos”.

Refirió Hernández García que a nivel nacional se habla de más de 40 asesinatos contra candidatos y candidatas, en tanto que en Jalisco está el caso de la desaparición de un aspirante en Mezquitic, el levantamiento de otro candidato en Tequila, así como el homicidio en contra del presidente municipal con licencia de Casimiro Castillo que pretendía reelegirse, amén de la dificultar de postular candidatos en algunos otros municipios, además de amenazas en contra de potenciales abanderados.

Incluso, propuso que se revisara el caso de aquellos municipios en donde se registró un solo candidato, pues posiblemente ahí se inhibió la participación de otros candidatos por un tema que tiene que ver con la inseguridad.

Estamos a a tres días de que arranques las campañas electorales -al primer minuto del domingo cuatro de abril- y es fecha de que ni el gobernador Enrique Alfaro ni el secretario general Enrique Ibarra ni el fiscal Gerardo Octavio Solís Gómez ni alguien del cuestionado gabinete de seguridad se han sentado a platicar sobre este delicado tema ante los dirigentes estatales de los partidos políticos que estarán en la contienda.

No debe ignorarse ni hacer oídos sordos a lo declarado por el dirigente priista a nombre de sus colegas del PAN y del PRD, así como de sus respectivos candidatos, que además estoy seguro que es el sentir del resto de los contendientes que no forman parte de esta alianza.

Ramiro agregó: “Hacemos pública esta preocupación porque demandamos de la autoridad que haya una acción inmediata y de manera definitiva. Hoy requerimos que se dé protección a quienes participan en este proceso. No es evadiendo, no es manteniendo la indiferencia por parte de la autoridad como se van a generar las garantías para que este proceso transcurra en paz y de manera ordenada”.

Considero que las autoridades electorales, federal y local, deberían también de hacerle un llamado a la autoridad estatal para que concrete la coordinación con las fuerzas federales, de manera que los candidatos no corran riesgo alguno o, peor aún, que sean víctimas de atentado alguno o de una acción directa en su contra.

La cuenta regresiva ha iniciado, y lo menos que pueden esperar los candidatos de todos los partidos es que, dentro de lo posible, puedan hacer campaña sin el temor o miedo de que su integridad corre peligro en cualquier punto del estado, porque lamentablemente hoy no hay ningún lugar seguro.

Ojalá y durante las campañas no haya nada qué lamentar.

Al tiempo…