Mientras Carlos Lomelí y Alberto Uribe se disputan las candidaturas de Morena a las alcaldías de Guadalajara o Zapopan, en Tlaquepaque quien se mantiene a la punta de los aspirantes es el actual regidor Alberto Maldonado Chavarín, quien ha metido el “acelerador” a su trabajo en las colonias.

En busca de repetir como contendiente, Maldonado Chavarín tiene a su favor el haber sido el candidato de Morena que mayor número de votos obtuvo en la elección del 2018 en la zona metropolitana, lo que se asegura está registrado en la dirigencia nacional y podría ser un factor importante que determine la decisión final.

La calificación que el regidor morenista ha recibido en algunos sondeos levantados en diversas colonias del municipio es positiva y alentadora para sus aspiraciones, y su trabajo en el Ayuntamiento no ha pasado tampoco desapercibido, aunque se sabe que el trabajo de la oposición ha sido de remar contra la corriente ante la postura de la alcaldesa María Elena Limón de cerrarles todos los espacios posibles.

Si la determinación de la dirigencia nacional, en tanto se integra lo que sería el comité o coordinación estatal, es jugar en Tlaquepaque con un candidato varón y apostarle por una mujer en otro municipio metropolitano, entonces encabezando la lista de aspirantes estaría Maldonado Chavarín por la posición que actualmente ocupa, el trabajo realizado y los sondeos levantados.

Y es que, sin duda, la lucha de Morena en Tlaquepaque podría ser de doble esfuerzo si se concreta una alianza entre el partido Movimiento Ciudadano y el partido Acción Nacional y juegan con el mismo candidato. O también pudiera ser que dicha alianza sea de facto, y aunque contiendan con su respectivo candidato, habrá acuerdo para apoyar “por debajo de la mesa” a uno de ellos.

Así, pues, Alberto Maldonado no tiene una tarea fácil, pero sin duda mantiene ya un paso adelante con su posición en el Ayuntamiento y el acercamiento que ha mantenido con la población. Y si bien no puede decir que ya “amarró” la candidatura porque “del plato a la boca se cae la sopa”, tendrá que caminar con pasos firmes y sobre el piso para llegar a la meta deseada.