Julio César Hernández
No hay duda que nuestros diputados andan acelerados y necesitan serenarse, requieren tranquilizarse y quizá ya les urgen unas buenas vacaciones o todo es cuestión de que se concentren en su trabajo y dejen de pensar en el futuro, ya sea en el 2012 o en una próxima responsabilidad.
Uno de estos casos es el del diputado Salvador Barajas del Toro, presidente de la Comisión de Vigilancia, quien de un tiempo para acá extrañamente ha dado declaraciones imprecisas y equivocadas respecto a las cuentas públicas, tanto que fue necesario que en una de ellas la misma Universidad de Guadalajara haya tenido que salir a enmendarle la plana y corregir la información que equivocadamente dio a los medios sobre la auditoría a esta Casa de Estudios.
Bueno, pues el caso más reciente del equívoco del diputado Barajas del Toro, con las consecuencias que ello acarreó, fue el pasado martes -hace ocho días-, cuando declaró a los medios que la Auditoría Superior del Estado envió a la Comisión de Vigilancia la Cuenta Pública 2009 del Gobierno del Estado sin cargos u observaciones.; que aquella sólo revisó el 28.3% del total del gasto del Ejecutivo, esto es 20 mil millones de pesos del presupuesto supuestamente ejercido que fue de 69 mil 983 millones de pesos.
Ignora el legislador priista que esta última cantidad no es el presupuesto ejercido por el Ejecutivo estatal, sino que de ese total poco más de 37 mil 586 millones de pesos el Ejecutivo lo reparte a otras áreas que son sujetas de fiscalización aparte, como el propio Poder Ejecutivo, el Instituto de Transparencia, el Cesjal, la Procuraduría de Desarrollo Urbano, el Instituto Electoral, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, entre otros.
Así, pues, el presupuesto del Gobierno del Estado sujeto a la fiscalización de la ASJ asciende únicamente a 32 mil 397 millones 488 mil 419 pesos con 75 centavos, y es parte de esta cantidad la que revisó la Auditoría, por lo que si auditó alrededor de 20 mil millones de pesos, entonces estamos hablando de poco más del 60% del presupuesto total ejercido por el Ejecutivo.
Y esto deben saberlo también todos los demás diputados integrantes de la Comisión de Vigilancia si es que están atentos a su trabajo y no tienen la mente “clavada” en el 2012, como también deben saber -de acuerdo a información recabada- que la Auditoría Superior hizo observaciones al Gobierno estatal que rebasan los 500 millones de pesos, parte de los cuales fueron solventados.
Y aquello que no pudieron solventar fue cubierto por el reembolso o reintegro en efectivo de poco más de 10 millones de pesos.
¿Todo esto no lo sabía Salvador Barajas del Toro, presidente de la Comisión de Vigilancia?
No, la verdad es que hay muchas cosas que los diputados ignoran.
Ya se las recordaremos.