No hay duda: En Morena, “genios y figuras, hasta la sepultura”.
El delegado electoral recién llegado a Jalisco, el senador José Narro Céspedes, anunció ayer que viene con la encomienda de “construir la unidad del proyecto de Morena”, mientras en Zacatecas continúa peleando contra la designación de David Monreal como candidato a la gubernatura, cargo al que sigue aspirando.
O sea que mientras en su tierra natal sigue disputando una candidatura que ya se definió, dice que llega a Jalisco para evitar que se den éstas disputas, pues sólo así se puede “construir la unidad” en Morena. Sin embargo, para que tenga credibilidad su dicho, debería de predicar con el ejemplo: aceptar que la suerte (encuesta-dedazo) no le benefició en esta ocasión y cerrar filas con el ungido para “construir la unidad de Morena” en Zacatecas.
Y es que por eso la unidad en Morena Jalisco está ausente, porque se disputan los espacios -como lo hace el propio Narro en Zacatecas- y eso es lo que ha llevado a Hugo Rodríguez Díaz a recurrir, con todo derecho, a las instancias legales para defender lo que él considera que le corresponde: ser titular como delegado presidente del partido, pese a que fue desconocido por la anterior dirigencia nacional y así lo ratificó el Instituto Nacional Electoral (INE).
Incluso, en este asunto, Narro Céspedes se pasó por el “arco del triunfo” -¿así se puede “construir la unidad”?- la decisión de la pasada dirigencia y la ratificación del INE y de la Sala Superior Guadalajara del Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial, que desconocen a Rodríguez Díaz como dirigente, pero que en su derecho él recurrió a la Sala Superior y está en espera de la resolución. De ganarla, nadie podrá discutirle nada, pero por lo pronto hoy el resultado ante las primeras instancias electorales no le han favorecido.
Y como él, muchos morenistas más que no hacen otra cosa que replicar a las “tribus” perredistas.
Pero de manera contradictoria, como para “echarle más gasolina al fuego”, Narro Céspedes anuncia que invitará a la ex dirigente Yeidckol Polevnsky -quien llegaría como delegada estatal- a trabajar juntos por la unidad de Morena en Jalisco, cuando ella ha reiterado aquí en Jalisco que Hugo Rodríguez no es el delegado presidente porque su dirigencia, cuando ella era secretaria general… ¡ya lo desconoció! ¿O acaso Polevnsky vendrá a Jalisco y se “tragará sus palabras”? Salvo que la Sala Superior del TFEPJ falle a favor de Hugo.
Además, creo que el reconocimiento o no de Hugo Rodríguez como dirigente de Morena en Jalisco no corresponde al “delegado electoral”.
Sin embargo, hay que reconocer que “para la foto” logró reunir a “sirios y troyanos” morenistas en la rueda de prensa que ofreció ayer al mediodía, pero hay que esperar a que tome las primeras decisiones para confirmar si la imagen proyectada en esa fotografía se lleva a los hechos, cosa que advierto muy difícil conociendo la naturaleza de la militancia y las razones que la mueven.
Así, pues, habrá que esperar a que corran los días -ya no tienen mucho tiempo-, se confirme la llegada o no de Yeidckol a Jalisco o nuevos nombramientos, para confirmar si José Narro puede “construir la unidad de Morena” en Jalisco “repicando las campanas y andar en la procesión”, o sea pelearle la candidatura a Monreal en Zacatecas y operar electoralmente en Jalisco.
Al tiempo…
