Lo que se temía que pudiera suceder, está a punto de concretarse: la fractura de la coalición de la izquierda jalisciense integrada en el Movimiento Progresista Jalisciense, encabezado por su candidato a la gubernatura Enrique Alfaro Ramírez.
Y es que en los últimos días se ha tensado en exceso la relación entre el Partido de la Revolución Democrática y los partidos del Trabajo y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia), que ya provocó hiciera acto de presencia el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, quien vino a dar un “manotazo” en la mesa para que su partido en Jalisco acatara las decisiones y acuerdos asumidos por las dirigencias nacionales de los tres partidos políticos.
Y esto tiene que ver, principalmente, con la postulación de candidatos a las presidencias municipales que se disputan las dos partes -los perredistas y los alfaristas-, y que se definirían a través de la aplicación de encuestas, principalmente las que corresponden a la zona metropolitana donde se han convertido en “manzanas de la discordia” las de Zapopan y Tlajomulco.
Pero, ¿qué originó todo este “desaguizado” que ha puesto en riesgo una coalición que desde que se integró quedó colgado de alfileres? La decisión de las dirigencias nacionales del PRD, PT y MC de quiénes deben de ser los candidatos a las alcaldías de la zona metropolitana, surgidos supuestamente de encuestas aplicadas el pasado fin de semana, pero sin tomar en cuenta a la dirigencia estatal del PRD, quien desconoció dichos resultados y no está de acuerdo con las presuntas encuestas.
Por la tarde, Alianza Ciudadana emitió un comunicado en el que aseguró que la Comisión Coordinadora Nacional del Movimiento Progresista emitió un comunicado de prensa donde anunció que se había tomado la decisión de postular a Fernando Garza Martínez como candidato a la alcaldía de Guadalajara; a Pablo Lemus Navarro a la presidencia municipal de Zapopan; y a Ismael del Toro al gobierno municipal de Tlajomulco.
Más tarde, el comité estatal del PRD emitió un comunicado en el anuncia que “desconoce en todos sus términos el comunicado de prensa difundido por Alianza Ciudadana. El PRD no ha resuelto aun las candidaturas de Guadalajara, Zapopan y Tlajomulco, tal como falsamente se informa. El convenio de coalición, signado por las partes que lo integran, define con claridad el procedimiento para alcanzar los acuerdos que nos permitan construir candidaturas comunes. Estos procedimientos, firmados antes por las partes, aun no se concluyen. Razón por la cual, este partido político no avala un comunicado que no es emitido por las instancias oficiales del PRD, nacional y estatal.
“La coalición lograda en Jalisco implica cumplir lo establecido en el convenio signado, por lo que mientras eso no ocurra, desconocemos cualquier anuncio o intento de albazo al margen de los procedimientos acordados por las partes, mediante el documento que permitió coaligarnos”, concluye.
Por la mañana Enrique Alfaro denunció que “la intromisión de agentes externos -que no identificó- pone en riesgo la coalición”, y aseguró: “No voy a aceptar que el proyecto esté secuestrado por nadie. Todo tiene un límite. Si este proyecto se ve secuestrado por un grupo de poder, yo no voy a ser candidato de ese proyecto”.
Luego vino el comunicado de Alianza Ciudadana y el desmentido del PRD.