No son pocos los que aún no salen de su extrañeza por la forma en que la senadora Xóchitl Gálvez se ha convertido en una figura “sensación” de la política al convertirse, de la noche a la mañana, en la figura que muchos creen que necesita la oposición para enfrentarse con éxito a cualquiera de quien resulte candidato o candidata de Morena a la presidencia de la República. Hay políticos de experiencia que ya ven sentada en la silla que hoy ocupa Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional.

Basto que le ganara al presidente un amparo y que se plantara afuera de Palacio Nacional exigiendo su derecho de réplica en la “mañanera”, para que se le considerara con la estatura para disputar la presidencia del país, cuando apenas dos semanas antes se le consideraba una de las serias aspirantes a la candidatura de la oposición a la jefatura de la Ciudad de México.

Pero no. Xóchitl Gálvez provocó un arrebato inusitado, no de la ciudadanía en general sino de un sector importante del “círculo rojo” y de la clase política, particularmente.

Con Xóchitl Gálvez se confirma otra vez el poder y la fuerza de las redes sociales para catapultar de la noche a la mañana a una figura de la política y convertirla en todo un fenómeno. También es cierto que la irrupción de la senadora como la “favorita” de ese sector fue sorpresiva y le descompuso a las cúpulas partidistas -Marko Cortés y Alejandro “Alito” Moreno, particularmente- el “cuadro” que ellos estaban diseñando para elegir a su candidato -masculino-, al que le ponían de nombre Santiago y de apellido Creel Miranda . A punto estuvo de descomponer ese “cuadro” antes otra senadora, Lilly Téllez, pero lograron desactivarla a tiempo. Xóchitl no estaba en el “guión” del PAN ni del PRI, y creo que tampoco del PRD.

Pero hoy ahí está. Y la pregunta es: ¿Los partidos políticos de la coalición le cederán contra su voluntad una candidatura que no estaba diseñada para ella? ¿Terminarán “doblándose” a la presión de las redes sociales? ¿O de verás jugarán limpio y aceptarán la victoria de la senadora Gálvez, en caso de que cumpla los requisitos establecidos y gane los debates y la votación?

La revista Opinión Política, en su más reciente edición aparecida el pasado lunes, publicó una entrevista con la política sensación del momento Xóchitl Gálvez, y de ella tomamos la siguiente pregunta:

No es cualquier cosa ser candidata a la presidencia de la República. ¿Xóchitl Gálvez tiene los pies bien puestos sobre la tierra, como para que no se maree con toda esta ola a su favor? ¿Cree que ir y pararse a la puerta de Palacio Nacional, es suficiente para querer ser candidata a la presidencia?

-Al ver a las ‘corcholatas’ de enfrente, requeteque me animo jajajajaja… O sea, ¿la verdad? Le doy la vuelta a los tres sobre conocer México. Ellos van a hablar desde el privilegio y tu servidora va a hablar desde la experiencia personal, sabe lo que es vender gelatinas de niña, le sé a lo que es venir a la ciudad a trabajar y estudiar, a luchar contra el mundo, a abrirte paso en el mundo de la ingeniería, a montar tu propia empresa… Ninguno de ellos tiene una empresa jajajaja… Ellos no saben lo que es generar empleos, pagar la nómina, lo que es que te vaya de la ‘chingada’ jajajajaja… Lo que es que con el Covid te cierren y no tengas para pagar la nómina.

“O sea, todo eso te forja, y eso en un gabinete presidencial te da muy buenos resultados… Quizás Marcelo (Ebrard) tenga un buen expertis internacional, que esa parte yo no la tengo, pero pues pones a alguien que le entienda, tampoco tienes que saber de todo. O sea… yo fui jefa delegacional con Claudia (Sheinbaum), y así que digas ¡Uy! Jajajaja. Yo creo que en mi caso sí tuve cosas más relevantes como delegada de la Miguel Hidalgo: demolí edificios ilegales, acabé con el mugrero que me dejaron en Masarik y construí el edificio delegacional. Quité todos los ambulantes del metro Auditorio, les dimos un apoyo económico, pero limpiamos ese mugrero.

“O sea, sí soy una mujer con decisión. Por el lado de capacidad y talento, no me amilano. Y no es que me maree, sino que a veces la gente cree y eso me pasó con (Vicente) Fox cuando entré al gabinete. Yo pensé que a los políticos se les salía el cerebro por la nariz. Neta: No se confundan, hay mucho ‘pendejo’ jajajajaja…

“Yo sí siento y tengo la sensibilidad social de la problemática en el país y esa la he trabajado durante años”.

La pregunta de aquellos viejos “64 mil pesos”: ¿Les arrebatará Xóchitl Gálvez la candidatura presidencial a quienes no la estaban diseñando para ella?

Al tiempo…