Luego de paladear tres meses un crecimiento en la aprobación ciudadana tras la aparición de la pandemia y tomar decisiones para enfrentarla, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez registra nuevamente una baja en sus calificaciones de acuerdo a las más recientes encuestas reveladas en los últimos días.

En esta semana las empresas C&E Research, Arias Consultores y Consulta Mitofksky, revelaron el resultado de sus mediciones en el pasado mes de agosto, y el mandatario jalisciense volvió a las “andadas”: registró un pésimo resultado al descender en sus calificaciones.

La caída de Alfaro en estas encuestas durante el mes pasado, muy bien podriamos enmarcarla parafraseando al extraordinario paisano escritor guanajuatense ya finado: Jorge Ibargüengoitia y sus “Relámpagos de agosto”.

C&E Research midió dos rubros: Desempeño y honestidad, y en ambos Alfaro Ramírez prácticamente “quedó a deber”. En desempeño se ubicó hasta la posición número 18 con el 39.8% de aprobación, por debajo de su colega aliancista Jaime Rodríguez “El Bronco” que obtuvo 42.5% y arriba de su adversaria Claudia Sheinbaum que se quedó con el 39.2%. En el renglón de honestidad, la calificación obtenida quedó muy lejana al discurso alfarista: 38%, colocado en el lugar 13.

En Arias y Consultores, Enrique Alfaro cayó aún más en el rubro de desempeño: al lugar 20, con 29.8 de aprobación -muy lejano del primer lugar de Manuel Vilas, de Yucatán, que obtuvo 54.2- y un altísimo 62.4 de reprobación. El mes anterior obtuvo una aprobación del 38.2, por lo que registró una dolorosa caída de 8.4 puntos.

Pero esta casa encuestadora midió otros rubros. En el de confianza, el tropiezo es doloroso, pues el 67.9& no confía en él y apenas un 29% reveló que sí. En el combate a la corrupción, apenas el 15.7% respondió que mejoró y un contundente 70.3% consideró que no ha mejorado.

Contra el discurso oficial que festina una supuesta baja en la incidencia delictiva, los jaliscienses opinan otra cosa, pues el 81% dijo que no ha mejorado la seguridad pública y sólo un 18% señaló que sí ha mejorado. Por lo tanto, el 77.3% respondió que se siente inseguro viviendo en Jalisco y un 22.7% dijo sentirse seguro.

La medición de Consulta Mitofsky registró la misma línea: a la baja.

En el rubro de desempeño, Alfaro se colocó en la posición número 12 con una aprobación del 51.8%, casi dos puntos menos que el mes anterior cuando registró una aprobación del 53.5%, y ya de por sí había perdido casi un punto respecto a junio cuando llegó a su mayor porcentaje: 54, contra 53.9 de mayo. 52 de abril, 35.4 de marzo y 28.6 de febrero.

Por último, C&E Research aplicó una medición sobre la reputación digital de los gobernadores y saber quién es quién en redes sociales, en la que el mandatario jalisciense quedó muy lejos de los primeros cinco lugares que obtuvieron una calificación de ocho para arriba.

Alfaro Ramírez se ubicó en el lugar número 13 con apenas el 6.1, calificación muy baja para los millones de pesos que sus empresas favoritas -Euzen, Indatcom y La Covacha- le han invertido a las redes sociales y los millones de pesos que ellas han cobrado por su trabajo, con lo que podemos concluir que en este rubro han sido un fracaso.

El descenso que Alfaro registra en las diversas encuestas difundidas en estos días es reflejo de un “regreso a la realidad”, luego de que el tema de la pandemia dejó de ser noticia ante la decisión del gobierno estatal de bajar la guardía, ampliar prácticamente en su totalidad la reactivacion económica y dejar en manos de la ciudadanía la responsabilidad de cuidarse o no ante el Covid-19, que se ha traducido en un incremento en el número de contagios y fallecimientos.