Por Julio César Hernández

Con la presentación de los aspirantes a encabezar el Comité Municipal del PAN en Zapopan, prácticamente arranca el proceso de elecciones internas que vivirá de ahora en adelante el partido en el gobierno, pues también se avecina la contienda por el comité en Guadalajara, proceso que, por cierto, ya ha dado mucho de qué hablar y ha generado también la difusión de diversos correos electrónicos, criticando la actitud del dirigente tapatío, Alfredo Argüelles Basave, por sus simpatías y apoyo a Manuel Romo, uno de los aspirantes, que tiene enfrente como rival al regidor Alejandro Madrigal.

Hasta el cierre de esta colaboración -antes de la presentación oficial-, se conocía de las aspiraciones del diputado local Bernardo Guzmán; de José Antonio de la Torre Bravo; y de Martín Gómez Pimentel.

Sin embargo, se sabe que la lucha por la dirigencia blanquiazul zapopana se dará entre los dos primeros, quienes tienen el apoyo de los dos grupos rivales en el PAN: el de Eduardo Rosales, que apoya a De la Torre, y el de Emilio González Márquez (entiéndase Herbert Taylor), que promueve a Guzmán.

Hay que reconocer que las contiendas panistas que atraen más la atención son, además de esta de Zapopan, la de Guadalajara y la del Comité Estatal, en las que están ya también “calentando motores” los grupos internos.

La elección en el resto de los comités no generan mayor interés.

Entrevistado el mes pasado por la revista “Política” del periódico OCHO COLUMNAS, el diputado Bernardo Guzmán se refería así a la postura de la dirigencia estatal respecto al proceso en Zapopan: “En el caso de dirigentes del PAN, desafortunadamente han mostrado simpatías públicas hacia uno de los candidatos (Pepe Toño). Yo les pediría que ojalá y pudieran sacar las manos del proceso electoral en Zapopan y, por nuestra parte, no vamos a permitir que personas ajenas a Zapopan metan las manos. La militancia decidirá quién ganará; un dirigente no debe enfocar la artillería hacia nosotros, pedimos un proceso en el que no exista fuero amigo en contra de ninguno de los contendientes”.

Creemos que las palabras del diputado aspirante son más que claras y elocuentes. Advierte de una probable intervención externa a los intereses de la militancia zapopana y no descarta la posibilidad del fuego amigo.

De no ser así, no se entendería entonces su referencia a ambos asuntos.

Por su lado, Pepe Toño -entrevistado en el mismo medio- advierte que en esta elección “no se trata de corrientes, yo no pretendo ser el candidato de un grupo (…). Pese a que me han querido identificar con muchos amigos que pertenecen a ciertos grupos, yo no he comprado esas diferencias ni las quiero comprar…”.

Creemos que las palabras de De la Torre Bravo tampoco requieren mayor explicación.

Finalmente, las declaraciones de ambos aspirantes ponen de manifiesto el ambiente que rodea a este proceso próximo a iniciar.

Por lo tanto, ¡hagan sus apuestas!