Luego de quedar en libertad -el 8 de agosto de 2018-, tras ser detenida y encarcelada en el gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto durante cinco años-, la maestra Elba Esther Gordillo Morales apareció públicamente concediendo una entrevista al periódico español El País publicada el 16 de febrero del 2020, al que le declaró que “pienso hablar, opinar y actuar en la vida de México”. Posteriormente, el 10 de julio de este año concedió una amplia, interesante y reveladora entrevista en el programa de televisión La Silla Roja. Ayer nuevamente apareció en dos entrevistas periodísticas con Ciro Gómez Leyva y Salvador García Soto, en el contexto de la designación de la maestra Leticia Ramírez Amaya como nueva secretaria de Educación en sustitución de Delfina Gómez, quien será candidata a la gubernatura del

En aquella entrevista en La Silla Roja -en la que confesó que los presidentes Carlos Salinas y Vicente Fox la invitaron a ser su secretaria de Educación, pero lo rechazó-, le preguntaron que si era su retorno a la vida pública, y Gordillo reiteró lo que le dijo al periódico español: “Sí quiero opinar, si quiero participar, pero no necesariamente un cargo”.

Mujer con un largo “colmillo” político, Elba Esther Gordillo sabe medir sus tiempos luego de los momentos convulsos que vivió a lo largo de su gestión al frente del sindicato magisterial, primero como secretaria general y luego como presidenta, hasta que fue detenida en el aeropuerto de la Ciudad de México cuando regresaba de San Diego, California, y se disponía a venir a Guadalajara para encabezar una asamblea extraordinaria del SNTE. En su momento se comentó, y ella lo confirmó en esta entrevista de julio pasado, que había sido víctima de una trampa del gobierno de Peña Nieto en la que, incluso, se sospechó de que pudo haber estado involucrada la dirigencia sindical.

Las apariciones públicas de Gordillo Morales parecen ser muy bien calculadas en tiempos y lugares, o sea a qué medios concede las entrevistas.

En La Silla Roja, al preguntarle si estaba retirada de la vida sindical, respondió que estaba “retirada de una polémica estéril donde la confrontación es lo que priva (…). Pero comprometida con las causas de la educación, de los maestros…”.

La preguntaron si se consideró una presa política, y dijo: “A toda acción responde una reacción. Hay reglas en el sistema. Yo le dije no a un gobierno y el gobierno actuó. Y yo sólo tenía dos opciones: traicionaba a mi gremio o aceptaba las decisiones de un presidente… y no las acepté”.

Aparte de referise a la nueva titular de la SEP, a la que dijo conocer como activista de la CNTE, a Ciro Gómez Leyva le declaró en Radio Fórmula que lamentaba que el actual gobierno puso a “la política por encima de la educación”; aseguró que “no estoy peleando por posiciones sino por el proyecto educativo”, y le aseguró que “no busco guerra, no busco pleito…”.

A García Soto, en El Heraldo televisión, le dijo que “hay momentos en que el silencio no es lo más sano”.

No hay duda que la maestra Elba Esther Gordillo volverá a ser un referente con miras al 2024, y no tanto porque, como ha dicho, pretenda ocupar un cargo público sino porque su actividad pública tendrá un peso en la vida política del país. “Pienso hablar, opinar y actuar en la vida de México”, le declaró a El País. Y hoy la maestra Gordillo está hablando y opinando, y seguramente pronto estará actuando.

Aunque por el momento políticamente ha sido discreta, es un secreto a voces -bueno, ya ni tan secreto-, que simpatiza con el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, para que sea el candidato a la presidencia de la República, ya sea por Morena o por cualquier otro partido o coalición. Incluso, se asegura que ya ha comenzado a trabajar con ese propósito.

En La Silla Roja le preguntaron que si de la “casa de enfrente” le gustada Marcelo Ebrard como candidato, a lo que respondió: “Lo quiero mucho. A Marcelo le tengo un extraordinario respeto personal, pero no es mi voluntad que sea porque yo quiero; habrá que ver si se juega con las reglas correctas para que sea (candidato presidencial de Morena)”.

Por lo pronto, ahí en esta entrevista anunció que está preparando un libro. “Yo quiero escribir mi historia, mis claros y mis oscuros. No soy blanca ni soy negra, tengo mis matices, tengo mis grises, pero negro no”.

Así, pues, podemos afirmar que la maestra Elba Esther Gordillo Morales está de regreso y que de ahora en adelante, siempre midiendo sus tiempos, dará mucho de qué hablar.

Y si no, al tiempo…