En un discurso político más de dirigente estatal del partido del gobierno, Movimiento Ciudadano, que técnico del presidente de la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado, el diputado Ricardo Rodríguez Jiménez terminó por repartir culpas, exaltar al gobierno alfarista, justificar el manejo de los recursos públicos, evadir pronunciar la palabra “deuda” para llamarla “financiamiento” y recriminar el “abandono” en el que dice los tiene el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador.

Lo que no hizo fue precisar, como presidente de la Comisión de Hacienda, toda la información de manera pormenorizada que se ha reclamado sobre el destino de los 6 mil 200 millones de pesos con los que el gobernador Enrique Alfaro pretende endeudar otra vez a Jalisco, ni aclaró todos los cuestionamientos que se han planteado al respecto.

Tampoco aclaró el manejo que se hizo del presupuesto del que ahora buscan tapar los “hoyos” abiertos no explicados y a los que se pretende destinar poco más de la mitad de la deuda solicitada y que, por lo tanto, no se le puede llamar “reactivación económica” al gasto que se quiere hacer en este ni en ningún otro rubro. El propio diputado así lo reconoce y declara en la rueda de prensa.

O sea, no hay una explicación puntual y transparente de cómo se abrió ese “hueco” en el presupuesto. Yo estoy seguro de que si todo se hizo bien, no habrá problema alguno para rendir cuentas puntuales de ese manejo presupuestal antes de que aprobar más deuda.

Cuando entró a hablar de números, lo hizo de manera tan generalizada que nada aclaró, nada respondió y todo quedó igual que antes de la rueda de prensa: muchas interrogantes y mucha opacidad. Por eso no tiene caso detenerse en comentar al respecto, pero el discurso político, ese sí dió para mucho.

Para empezar, Ricardo Rodríguez inició con el “pie izquierdo” en su extraña insistencia por deslindar al gobernador Alfaro Ramírez de endeudar más a Jalisco, pues aseguró que “la propuesta de financiamiento” se los hicieron llegar “los ciudadanos a través de una mesa que ha convocado el gobierno del Estado”.

Y como para que realmente nos la creyéramos, reiteró: “Lo repito para que quede claro: Esta (la deuda) no fue una decisión unilateral ni del gobernador en turno ni de un partido político, sino de una necesidad (sic) urgente de todos los sectores en este estado integrados en esa mesa…”.

Aunque por si no había sido suficiente su insistencia, remató: “Se está solicitando este financiamiento (deuda) porque la sociedad civil organizada lo está pidiendo (…) y no es por capricho de ningún partido político…”.

A ver, para evitar que nos pretenda engañar o hacer creer que los jaliscienses se “chupan el dedo”, expliquémoslo con peras y manzanas: La propuesta de “financiamiento” (deuda) que se hizo llegar a los diputados no fue por parte de “los ciudadanos a través de una mesa”. No, la solicitud formal y oficial del endeudamiento está firmada por el gobernador del Estado, Enrique Alfaro Ramírez, y el secretario general de Gobierno, Enrique Ibarra Pedroza, no por esos “ciudadanos”.

Además, como el propio legislador lo dijo, esa comisión fue “convocada por el gobierno del Estado, pero creada por el Ejecutivo, según consta en el propio periódico oficial El Estado de Jalisco; las sesiones se realizan en la residencia oficial del gobernador, Casa Jalisco; la sesión en la que presuntamente se aprobó esa propuesta fue en Casa Jalisco y encabezada por el Mandatario estatal… ¿Entonces?

Dijo Rodríguez Jiménez que “hoy las decisiones aquí se toman por consenso y no en la opacidad y mucho menos a espaldas de los jaliscienses”. Pregunto: Si no fue iniciativa del gobernador, ¿por qué no se hizo del conocimiento de todos los jaliscienses la propuesta de endeudamiento que plantearon los “notables” de esa mesa a través de un desplegado en la prensa para conocer la reacción de la sociedad en general al respecto, antes de enviar la solicitud al Congreso? ¿O de veras esos “iluminados” representan a todos los jaliscienses como para tomarles la palabra inmediatamente y pedirle a los diputados le aprueben su deuda?

Luego vino el lamento por el abandono del gobierno lópezobradorista:

“El gobierno federal ha enviado señales de indiferencia (…); ha estado haciendo anuncios y tomado decisiones sin buscar el mínimo consenso, en donde no incluyen a Jalisco ni a otros estados (…). En Jalisco estamos solos, abandonados por el gobierno federal (…). Hay ausencia total del gobierno federal (…). No nos gusta la indiferencia del gobierno federal…”.

En este punto, ¿a quién le creemos? ¿Al diputado Ricardo Rodríguez con este lamento por el desdén lópezobradorista o al gobernador Enrique Alfaro que apenas el pasado 14 de mayo, en materia económica y financiera, hizo un amplio reconocimiento al secretario de Finanzas del gobierno federal -ese al que el diputado acusa de ser indiferente y de abandono-, Arturo Herrera, cuando en sus redes sociales escribió:

“Así como hemos señalado que hay funcionarios del gobierno federal que le han dado la espalda a Jalisco, Arturo Herrera ha sido siempre atento y abierto a la construcción de acuerdos. Por eso tiene nuestro respeto y agradecimiento”.

El diputado Rodríguez o no leyó el tuit de su jefe político o no se acordó de él, porque al menos en términos financieros, de acuerdo a lo escrito por el gobernador Alfaro, el gobierno federal ni ha sido indiferente ni los ha abandonado.

Pero, en fin, los tropiezos del alfarismo por convencernos o hacernos creer que endeudar más a Jalisco es la salida al problema de la pandemia, evidencian todo lo contrario, y máxime cuando no tienen respuesta clara y precisa para los cuestionamientos puntuales que se le han hecho a fin de encontrarle justificación a una decisión que sólo beneficia a pocos, y a esos pocos muy cercanos a Casa Jalisco.