Mal y de malas…

En el partido Revolucionario Institucional parece que el futuro se les fue y que hoy lo que quede servirá para demostrar que alguna vez existió.

Al éxodo de militantes, el otrora partidazo que mantuvo el poder en México por más de 70 años enfrenta ahora el triste papel de partido “satélite” que le ha tenido que apostar a una alianza con su histórico adversario, el partido Acción Nacional, y su “primo” pero fuerte rival que en 1988 estuvo a punto de arrebatarle el poder, el partido de la Revolución Democrática.

El pretexto de esta alianza: evitar que el partido que fundaron e integran miles de ex priistas, comandado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, mantenga la mayoría de la Cámara de Diputados en la próxima legislatura federal.

Pero esa alianza, más que unir a los priistas para luchar contra su adversario que hoy ostenta la presidencia de la República, los ha dividido; y en Jalisco -¿dónde más?- llegó “el rumor de la discordia” y ha colocado a su dirigencia estatal en una situación muy complicada frente a la rebelión que puede estallar al interior de uno de sus principales sectores -venido a menos, como todo el partido-, que alguna vez fue un fuerte pilar: el sector campesino.

Y es que esta alianza con el PAN estaría dejando fuera de la jugada a la Liga de Comunidades Agrarias (CNC Jalisco), y en particular a su dirigente Eliazer Ayala Rodríguez, quien recibió un golpe “seco” a sus aspiraciones políticas y a las de su sector, luego de que en estas negociaciones se le entregó nada menos que el Distrito 15 al panismo.

El Distrito 15 ha sido tradicionalmente de la CNC. De este distrito han sido legisladores prácticamente todos sus dirigentes y es un territorio que Ayala Rodríguez ha controlado por muchos años. Incluso, de este Distrito es oriundo y ha sido diputado el actual presidente priista, Ramiro Hernández García.

Pero hoy la suerte les ha dado la espalda… por órdenes de “Alito” Moreno, dirigente nacional del PRI. Para desgracia del PRI y de los priistas jaliscienses, sólo esto les faltaba, que les arrebataran el Distrito 15 antes de jugarlo. Podríamos apostar que ahí estaba una gran parte del reducto priista en el Estado, que si alguna esperanza había de ganar una elección por tierra, en las urnas, era este distrito.

Sin embargo, “Alito” Moreno parece tener “otros datos” y se lo entregó al PAN que, todo parece indicar, volverá a mandar a contender por este distrito al actual diputado federal Absalón García -eterno adversario de Ayala Rodríguez-, y quien en estas condiciones buscaría la reelección.

Esto, por supuesto, ha generado el enojo de los cenecistas y de Eliazer Ayala en particular, a quien no han podido colocar como candidato en ningún espacio. El hecho de que como resultado de una negociación les arrebaten este icónico distrito para la CNC y el PRI, y que se lo entreguen al más férreo rival político del dirigente cenecista, es el “acabose”.

Y todo parece indicar que nada puede hacer Ramiro Hernández para rescatar este distrito para los suyos.

Por eso -salvo que suceda algo de última hora-, pende sobre el PRI Jalisco la amenaza de que Eliazer Ramírez y la CNC, o una parte importante de este sector, terminen renunciando a su militancia priista, pues advierten que no podría haber mayor humillación para ellos que obligarlos a hacer campaña por su eterno adversario y, además, llevarlo al triunfo.

Así están las cosas al interior de un PRI que ya no es capaz de sostenerse de pie solo, que requiere de “bules” (PAN y PRD) para nadar y que en su agonía poco le importa, incluso, perder a una gran parte de un sector que, dígase lo que se diga, aún le es fiel: el campesino.

Recordemos que hoy dos de sus dirigentes están en otros partidos: Gabriel “El Chato” Ponce Miranda está en Movimiento Ciudadano, y Osiel Nieves en Redes Sociales Progresistas, el partido de la maestra Elba Esther Gordillo.

En estos días, pues, podríamos conocer el desenlace… Al tiempo.